ESTUDIO 13
PLENITUD EN EL ESPIRITU
Pasaje: 5:15-21
OBJETIVOS DEL ESTUDIO
1. Conocer la enseñanza bíblica sobre la vida en la plenitud del Espíritu.
2. Afirmarse en las demandas que la Escritura establece para una vida cristiana en esa dimensión.
3. Ajustar la vida personal a esos principios.
TAREAS
1. Dedicar tiempo a la oración pidiendo al Señor su ayuda para comprender su Palabra y vivir conforme a ella.
2. Leer el pasaje varias veces y, a ser posible, en versiones distintas.
3. Estudiar el pasaje sin ayuda alguna, anotando las conclusiones.
4. Estudiar el pasaje con ayuda de las notas, comparando luego los resultados.
5. Responder a las preguntas de repaso del estudio.
6. Anotar las dificultades que queden sin resolver para consultarlas personalmente
INTRODUCCION
El apóstol habla varias veces, en la epístola, de la Persona y obra de Dios, el Espíritu Santo. Enseñó que el Espíritu sella al creyente (1:13). Instruyó a no contristarlo (4:30). Ahora va a progresar hacia la vida en la plenitud del Espíritu. Esto es considerado por algunos como algo prácticamente inalcanzable, mientras que la Biblia enseña que es el estado que Dios desea para cada creyente. Sin duda para llegar a la plenitud del Espíritu es preciso dejar algunas cosas -de las que Pablo indica varias en la carta- tales como las consideradas en el estudio anterior. Esta limpieza dispondrá el camino necesario para que el Espíritu se manifieste en plenitud. Los resultados de esta presencia plena, serán manifestados en el modo que se cita en los vv.19-20.
3.5. En relación con el Espíritu Santo (5:18-21)
I. ANDANDO EN EL ESPIRITU (5:15-20)
1. Andando en sabiduría (v.15)
1.1. Una llamada de atención: "Mirad".
1.1.1. El creyente tiene que estar atento a un modo de vida como el que va a indicar.
1.2. Una atención diligente.
1.2.1. Todo cuanto merece la pena exige diligencia.
1.2.2. El creyente debe prestar atención esmerada a como se está desarrollando su vida.
1.3. Sabiduría.
1.3.1. La sabiduría no es un conjunto de conocimientos, sino una conducta ante Dios.
1.3.2. La necedad no es la ausencia de conocimiento, sino una actitud o comportamiento equivocado en relación
con Dios.
1.3.3. Cristo se reveló como el "portento y saber de Dios (1.Cor.1:23)
1.3.4. El pensamiento del necio rechaza la sabiduría de Dios (1.Cor.1:23)
1.3.5. La verdadera sabiduría es ajustarse al pensamiento divino (1.Cor.2:2)
1.3.4. Esto implica una sumisión a la voluntad de Dios en total obediencia.
1.3.5. Cualquiera que no se somete incondicionalmente a la voluntad de Dios desde la base de una absoluta entrega,
se muestra como un "necio",
en el sentido bíblico.
1.3.6. La necedad es el rechazo de Dios y la autoexaltación del hombre. (Rom.1:18ss; 1.Cor.1:21)
2. La manifestación del "andar sabio" (v.16)
2.1. Aprovechar el tiempo.
2.1.1. Literalmente "redimir" el tiempo (gr. "exagorzo").
2.1.2. Significa comprar el tiempo, rescatándolo del entorno de mal en que los impíos lo utilizan.
2.1.3. La palabra es muy ilustrativa, como si el tiempo estuviera a la venta en el mercado y el creyente lo compra
para su servicio.
2.1.4. La misma frase se repite en Col.4:5.
2.2. Para los impíos "aprovechar bien el tiempo" sería algo así como aprovechar cualquier ocasión para practicar el pecado en egoísmo propio.
2.3. Para el creyente el tiempo ha de ser utilizado para hacer el bien, en una vida de santificación.
2.4. Tiempo (gr."kairós), es una época.
2.4.1. El creyente está en una admirable época, la de la gracia divina (2.Cor.6:2)
2.5. El tiempo es un bien que pasa y no es posible recuperar.
2.5.1. Cada día Dios presenta oportunidades de hacer bien, por lo que deben ser aprovechadas, como si se tratara de un tesoro que ha de ser bien utilizado.
2.6. Pablo está enseñando que el creyente debe ordenar bien la vida, aprovechando toda oportunidad para el testimonio.
2.6.1. Aprovechar es "apoderarse" de la oportunidad para hacer el bien.
2.7. La razón para ese diligente aprovechamiento del tiempo: "los días son malos".
2.7.1. Los días, la época, está bajo el poder de Satanás (1.Jn.5:19).
2.7.2. No sólo el tiempo de Pablo, sino también el actual.
2.7.3. Los días están gobernados por el mal, son días del reino de las tinieblas, controlados
por el dios de este siglo.
2.7.4. Las ocasiones para hacer el bien están siempre por debajo de las ocasiones para pecar que pueden
aparecer en cada día, por lo que aquellas han de ser aprovechadas.
2.7.5. El tiempo ha de ser aprovechado mientras dure (Sal.90.12)
2.7.6. Nadie puede "estirar"
el tiempo, pero todos podemos utilizarlo sacándole el máximo partido.
2.8. Pablo está enseñando al creyente el uso disciplinado del tiempo.
2.8.1. El creyente como siervo de Dios, tendrá que dar cuenta de la administración sabia del tiempo que Dios le ha entregado.
3. La voluntad de Dios (v.17)
3.1. El insensato pregunta continuamente sobre cual es la voluntad de Dios para su vida.
3.1.1. Muchos creyentes se detienen poniendo como disculpa para su inactividad, que no están seguros de cual es la voluntad de Dios para su vida.
3.2. Conocer la voluntad de Dios es imprescindible, porque esa es la verdadera sabiduría.
3.2.1. La propia voluntad en necedad.
3.2.2. Cristo enseña y da ejemplo de la importancia de la voluntad de Dios.
(1) Lo establece como elemento en la oración (Mt.6:10)
(2) La cumplió en su vida (Jn.4:34)
(3) La deseó con angustia (Lc.22:42)
3.4. En relación con la vida de santificación, la voluntad de Dios está claramente señalada en la Escritura.
3.4.1. Su voluntad es la santificación del creyente (1.Tes.4:3)
3.4.2. Su voluntad es que el creyente viva en continua gratitud (1.Tes.5:18)
3.4.3. Su voluntad es que el creyente viva en docilidad (He.13:20-21)
4. La vida en la plenitud del Espíritu 8v.18)
4.1. Un contraste notable.
4.1.1. Un hombre lleno de vino o lleno de Espíritu.
4.1.2. La idea fundamental esta en el control de algo sobre alguien.
4.1.3. Un hombre embriagado, "lleno de vino", está controlado por el alcohol y no es dueño
de sus propias acciones.
4.1.4. El creyente lleno de Espíritu es controlado y dirigido plenamente por Él.
4.1.5. Los acciones bajo el control del Espíritu no son actos fuera del control del creyente, sino actividades
plenamente comprendidas por él y hechas bajo el impulso del Espíritu.
4.1. Un mandamiento y no un consejo: "Sed llenos del Espíritu"
4.1.1. El verbo (gr. "pleroústhe") está en modo imperativo.
4.1.2. La plenitud del Espíritu es posible, sino el mandamiento carecería de sentido.
4.2. Un error común.
4.2.1. La plenitud del Espíritu no es la manifestación de dones "espectaculares" o, como algunos llaman "dones carismáticos".
(1) Referidos especialmente a: Sanidades y lenguas (1.Cor.12:9-10).
(2) Dones no vigentes hoy.
4.2.2. La plenitud del Espíritu no presupone una mayor abundancia de dones para el creyente.
(1) Primeramente porque los dones son dados soberanamente y no en razón a méritos personales (1.Cor.12:11)
(2) En segundo lugar porque la espiritualidad o carnalidad no están en relación con los dones otorgados.
Sirva de ejemplo la iglesia en Corinto en donde todos tenían abundancia de dones y Pablo les llama carnales
(1.Cor.3:1,4)
4.3. Lo que no es la plenitud del Espíritu.
4.3.1. No es la "venida" del Espíritu, un nuevo descenso.
(1) Eso ocurrió una sola vez para siempre en relación con la Iglesia (Hch.2:2-4)
(2) Sin el descenso del Espíritu no habría Iglesia, porque no habría un cuerpo en Cristo (1.Cor.12:13)
(3) El creyente no debe pedir, bien en oración o en canto, que "venga
el Espíritu", porque ya vino.
4.3.2. No es el bautismo del Espíritu Santo.
(1) Fue una acción divina hecha una vez en la vida del cristiano (1.Cor.12:13)
(2) No hay repetición del bautismo.
4.3.3. No es la morada del Espíritu.
(1) El Espíritu mora en todo creyente desde el día que creyó (1.Cor.3:16; 6:19)
(2) Quien no tiene el Espíritu Santo no es salvo (Rom.8:9)
(3) Los apóstatas no tienen el Espíritu Santo, por tanto se vuelven atrás (Jd.19)
(4) El Espíritu Santo no se retira jamás del creyente (Jn.14:16)
(5) Ningún pecado que el creyente pueda cometer acarrea la pérdida del Espíritu Santo.
1. Si eso pudiera ocurrir se podría perder la salvación.
2. Algunos textos de la carta a los Hebreos, son usados incorrectamente por los arminianos para enseñar la posibilidad de perder la salvación (He.2:1-4; 6:4-8; 10:26-31)
4.3.4. No es el sello del Espíritu (1:13).
(1) De su significado ya se estudio en ese lugar.
4.4. Lo que es la plenitud del Espíritu.
4.4.1. Es ser controlado totalmente por el Espíritu (v.18)
(1) El Espíritu viene a controlar plenamente al creyente, tomando posesión absoluta de todo cuanto es, conduciéndole conforme a Su voluntad, y produciendo en él el fruto del Espíritu en plenitud.
4.4.2. Una característica notable es su repetición.
(1) Ocurre varias veces en la experiencia cristiana (Hch.2:4; 4:31)
(2) Esta es una de las grandes bendiciones, ya que si no fuera repetible el creyente, a causa del pecado, no estaría
lleno por mucho tiempo.
4.4.3. La plenitud del Espíritu puede o no ser acompañada de manifestaciones externas de gozo y alabanza.
(1) En ocasiones, la plenitud del Espíritu se manifiesta en la admirable paz y tranquilidad que produce la presencia de Dios en plenitud en el creyente.
(2) Tratar de que se manifiesten acciones espectaculares es someter la voluntad de Dios a la voluntad del hombre.
4.5. La plenitud es el propósito divino para la vida cristiana.
4.5.1. La plenitud no debiera ser una excepción, sino la condición normal.
4.5.2. Impedir la acción plena del Espíritu es pecado, por cuanto se trata de quebrantar el mandamiento:
"Sed llenos".
4.6. Las condiciones para ser llenos del Espíritu.
4.6.1. No apagar el Espíritu (1.Tes.5:19)
(1) Allí el verbo está en modo imperativo: "Dejad ya de apagar al Espíritu"
(2) Apagar es resistirle.
(3) Es lo contrario a la vida rendida totalmente a Dios (Rom.12:1)
4.6.2. No contristar al Espíritu 4:30
(1) Vida en donde hay pecado sin confesar.
4.6.3. Andar en el Espíritu (Gal.5:16)
(1) Vida de dependencia de Dios en perfecta sujeción al Espíritu.
(2) Es imprescindible ya que las demandas de la vida cristiana son superiores a las fuerzas del creyente.
(3) Es imprescindible para victoria sobre la carne (Gal.5:16)
5. Primera consecuencia de la plenitud: Comunión y alabanza (v.19)
5.1. "Hablando entre vosotros".
5.2. Las obras de la carne producen separaciones entre hermanos y rotura de comunión (Gal.5:20; 1.Cor.1:10-12)
5.3. El creyente lleno de Espíritu ama la reunión eclesial para el culto en comunión con sus hermanos.
5.3.1. Quien no ama las reunión y no asiste a ellas, no vive en plenitud del Espíritu (He.10:25)
5.4. La alabanza expresada en cánticos.
5.4.1. Salmos, partes del salterio de la Escritura.
5.4.2. Himnos, canciones que tienen un contenido doctrinal de enseñanza profunda
5.4.3. Cánticos espirituales, aquellos que expresan algún aspecto de vida cristiana.
5.4.4. La iglesia primitiva cantaba en sus cultos.
(1) Algunos de sus himnos están recogidos en el Nuevo Testamento (Fil.2:6-11; 1.Tim.1:17; 2:5ss; 6:15ss; 2.Tim.2:11-13)
5.5. La alabanza ha de salir de un corazón controlado por el Espíritu.
5.5.1. Pablo enseña claramente que las acciones de gracias que se expresan en cánticos, deben salir del corazón.
5.5.2. Si lo que se expresa con la boca no sale de una profunda sinceridad del corazón, es una hipocresía.
5.5.3. A Dios sólo se le puede alabar al impulso del Espíritu y en verdad (Jn.4:24)
5.5. La música en la alabanza: "cantando y alabando"
5.5.1. Literalmente: "cantando y salmodiando".
5.5.2. La música coral e instrumental están incluidas en esas palabras (Ver Sal.150)
Escribe F. Lacueva:
"Quienes, por un falso puritanismo, se niegan a usar instrumentos músicos (¡ni siquiera un pequeño armonio!) en el culto eclesial, están desobedeciendo al apóstol"
5.5.3. La música instrumental en el culto no es, por sí misma, necesaria pero es conveniente para la afinación y buen canto.
5.5.4. No hay instrumentos espirituales y otros que no lo son. Cualquier instrumento musical debidamente tocado
con la reverencia que requiere el culto, es apto para ayudar a la alabanza congregacional.
5.5.5. Sin duda, las costumbres y tradiciones, han hecho de la música y de la forma del canto (que incluyen
expresiones rítmicas, como palmas, percusiones, etc.) verdaderos tabúes, ocasionando no pocos problemas
y limitando la libertad espiritual.
5.5.6. Por otro lado el desorden generalizado con música sensual, que en ocasiones apaga y sustituye las
voces de los creyentes, es un peligro a evitar tan importante como el que antecede.
6. Segunda consecuencia de la plenitud: Gratitud (v.20)
6.1. Una gratitud constante en el tiempo:"Siempre"
6.2. Una gratitud sin límite: "Por todo" (Fil.4:6; 1.Tes.5:18)
6.2.1. Pablo no enseña que demos gracias a Dios por el mal que padecemos, sino que mostremos un espíritu de gratitud incluso en esas circunstancias (Job.1:20-21)
6.2.2. La inmensidad de los beneficios recibidos superan en todo a las pruebas que padecemos.
6.3. La gratitud se dirige al Padre como fuente de todo bien y toda buena dádiva (Stg.1:17)
6.4. Como no hay gratitud y alabanza sin oración, esta se dirige al Padre en el nombre del Señor
Jesucristo.
6.4.1. En razón de que es el único Mediador (1.Tim.2:5)
7. Tercera consecuencia de la plenitud: Sumisión (v.21)
7.1. Pablo enseña una sumisión recíproca entre los creyentes.
7.2. Esta sumisión tiene que ver también con las relaciones familiares.
7.3. La ética del cristiano en el hogar y en el mundo, descansa en esta premisa de sumisión.
7.4. Pablo no habla de sujeción.
7.4.1. El verbo griego ("hupotassómenoi") en participio de presente de la voz media-pasiva, indica subordinación.
7.5. La subordinación espiritual es lo que permite el correcto funcionamiento de la iglesia y la familia cristianas.
7.6. Esta disposición permitirá llevar a cabo las acciones del amor generoso que busca el bien ajeno
(1.Cor.10:24)
7.7. Todo ello ha de hacerse en el temor de Cristo.
7.7.1. En la mayoría de los MSS se lee de esa manera: ...en el temor de Cristo.
7.7.2. Significa: por respeto a Cristo.
II. APLICACION PERSONAL.
1. La vida en la plenitud del Espíritu afecta a todas las relaciones del creyente.
1.1. El creyente tendrá una relación armoniosa con Dios y con los hermanos.
1.2. El cristiano alaba a Dios y mantiene comunión con sus hermanos.
1.3. Los creyentes llenos de Espíritu se aman entrañablemente unos a otros.
2. Una pregunta personal y solemne: ¿Estoy siendo llenado del Espíritu o estoy contristando al Espíritu?
PREGUNTAS DE REPASO PARA EL ESTUDIO 13
1. ¿Como debe ser el "andar" del cristiano?
2. ¿Qué significa "aprovechando el tiempo"?
3. ¿Qué son los "días malos"?
4. Indica tres manifestaciones de la voluntad de Dios para la vida del creyente.
5. Explica el v.8 en cuanto a ejemplos.
6. ¿Qué cosas no son
la plenitud del Espíritu?
7. ¿Qué es la plenitud del Espíritu?
8. ¿Es lícita la música coral e instrumental en el culto cristiano?
9. ¿Qué tres consecuencias produce la plenitud del Espíritu?