Estudios Bíblicos en Siguiendo sus Pisadas |
Uno de los nombres
con que se denomina al Señor Jesucristo es "Cristo", que proviene del griego y significa lo mismo
que el hebreo "Mesías". Ambos significan "ungido". Muchos reyes eran ungidos, pero en
la historia de Israel se fue dando cada vez mayor importancia al Ungido de Dios, el Cristo. 2 Samuel 7:12-16 menciona
a quien reinaría eternamente, y cuyo trono no sería conmovido. Podemos ver a Cristo de 3 maneras
distintas:
1) Cristo en la profecía:
Las profecías hablan de Cristo desde 2 puntos de vista:
a) La "simiente": Génesis 3:15 nos habla de que la simiente de la mujer heriría a la serpiente.
Aquí se refiere a la promesa del advenimiento del Cristo para derrotar a Satanás. Heb.2:14 nos habla
de la victoria de Cristo sobre aquella serpiente. La serpiente le hirió, pero no mortalmente. Gá.
3:16 La promesa a Abraham también nos habla de Cristo.
b) El Ungido: Deut. 18:15 contiene otra profecía acerca del Mesías, en este caso habla de que Dios
levantará un profeta. Juan 1:19-21 Los judíos preguntaroa a Juan si era él el profeta. Según
el Salmo 2, es el rey, y el Salmo 110 lo presenta como sacerdote ("Tú eres sacerdote para siempre según
el orden de Melquisedec"). Según la Palabra de Dios, tanto el profeta, como el rey y el sacerdote debían
ser ungidos.
c) Los sufrimientos y las glorias: 1 Pedro 1:11 nos habla de los profetas que habían indagado acerca de
la salvación, pues "el Espíritu de Cristo que estaba en ellos anunciaba de antemano los sufrimientos
de Cristo, y las glorias que vendrían tras ellos. Isaías 53, Salmos 22,69 y 102 nos hablan de este
tema.
2) El Cristo histórico:
a) Su nacimiento: La genealogía del Señor de Mateo 1 culmina diciendo que "de María...nació
Jesús, llamado el Cristo". "Os ha nacido hoy un Salvador, que es Cristo el Señor"
Lucas 2:11.
b) Durante su ministerio: Juan 1:41 Andrés se encuentra con su hermano Simón y le dice "hemos
hallado al Mesías, que traducido es, el Cristo". Pedro dirá más tarde "Tú
eres el Cristo" (Marcos 8:29). Mateo 26:63,64 Es el Señor mismo quien confiesa que él es el
Cristo.
c) El testimonio de los apóstoles: Hechos 5:42 A pesar de las persecuciones, los apóstoles no cesaban
de predicar a Cristo. Hechos 17:3 Pablo también anunciaba que Jesús era el Cristo. Hechos 18:28 Apolos,
"con gran vehemencia...demostraba por las Escrituras que Jesús era el Cristo". El Cristo que había
vivido en la tierra, ¿no era el mismo que habían anunciado los profetas?
3) El Cristo vivo:
El Cristo que vivió en este mundo murió, pero también resucitó. 1 Co. 15:17-23. Hoy
está en el cielo, "viviendo siempre para interceder por ellos...los que por él se acercan a
Dios." (Hebreos 7:25) El creyente ha resucitado juntamente con él (Colosenses 3:1) También Cristo
habita por la fe en el corazón de cada creyente (Efesios 3:17). Cristo, anunciado por los profetas, aparecido
una primera vez aquí en la tierra, "aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado,
para salvar a los que le esperan." (Hebreos 9:28).
Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos" (Hebreos 13:8)
EL SEÑOR:
Filipenses 2:9-11 nos muestra, luego de la humillación de Cristo, su exaltación, y que Dios le exaltó
hasta lo sumo, para que "toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre"
1) El Señor en los evangelios: no es común que antes de la resurrección se le llame Señor
a Jesús. Lucas 7:11 nos menciona una de esas oportunidades. ¿Por qué se le llama Señor
aquí? Porque va a desplegar todo su poder divino para resucitar. Únicamente alguien que es Señor
puede hacerlo. Lucas 10:1 Sólo el Señor tiene autoridad para elegir y enviar a sus discípulos.
Lucas 22:61 El Señor puede sostener una fe desfalleciente, y nadie más.
Después de la resurrección se le llama a menudo Señor (Lucas 24:34, Juan 20:18; 21:7, Marcos
16:19-20).
2) En los Hechos y en las epístolas: su título de Señor es destacado. Son muchos los pasajes
que se pueden citar, pero 1 Corintios 12:3 nos da la clave: "nadie puede llamar a Jesús Señor,
sino por el Espíritu Santo". Puede hablarse de Jesús de Nazaret, de Cristo, de Jesucristo, pero
para poder decir sinceramente "Señor Jesús" es necesario el nuevo nacimiento.
3) Cabeza sobre todas las cosas a la iglesia: Efesios 1:22, Salmo 45:10,11. La Cena del Señor es muy importante
para el creyente. En 1 Corintios 11:20-32 aparece siete veces la expresión Señor. Será el
mismo Señor, y no los ángeles, quien busque a la iglesia. En 1 Tes. 4:15-17 se nos habla del Señor
5 veces seguidas. ¡Cuán importante es para la iglesia esta denominación de Jesucristo: su Señor!
4) El Rey de los judíos: Cuando para la iglesia Cristo es el Señor, para Israel es el Rey. Cuidemos
de no confundir estos dos términos en nuestros cantos u oraciones. La primera pregunta del nuevo testamento
es: ¿dónde está el rey de los judíos? Juan 1:49, Mateo 21:5
5) Rey de reyes y Señor de señores: Daniel 2:44,45 y 7:13,14 Bastó una piedra para desmenuzar
la imagen. Un día aquel varón de dolores que llevó la corona de espinas vendrá del
cielo coronado con varias diademas, llevando escrito un nombre: "REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES"
(Apocalipsis 19:11-16) 1 Corintios 15:25, Efesios 1:9,10, Hebreos 1:2
6) Mi Señor: Juan 20:13, Juan 20:28, Filipenses 3:8 Conocer a Cristo como Salvador da la paz con Dios, pero
nos obliga en la práctica a decirle "Señor mío" y a obedecerle en todo. 1 Corintios
6:13 El cuerpo es para el Señor. Efesios 5:8,10 Comprobar lo que es agradable al Señor. Efesios 6:7
Sirviendo de buena voluntad. 2 Timoteo 4:8 Me está guardada la corona de justicia, la cual me dará
el Señor. Que sea nuestro sentir decir "Mi Señor" y actuar en base a que lo decimos.