INTRODUCCION
Como se ha indicado en la introducción al anterior volumen sobre "Jesús de Nazaret", el estudio de la Persona y la Obra de Jesucristo es, sin duda, una terea a la que todo cristiano está llamado. Dicho estudio se ha dividido en tres partes, que se desarrollan en otros tantos "Temas de estudio y bosquejos de predicación". En el primero de ellos, se trató de presentar una síntesis de los "Viajes y Milagros del Señor". En este segundo se hace una selección de algunas de las "parábolas" que Cristo pronució como ilustración de profundas verdades que, a lo largo de su ministerio, quiso enseñar a las gentes y a sus discípulos.
Hacer una selección entre las parábolas obedece a las limitaciones de una enseñanza regulada
para un periodo de tiempo, de otro modo no debería hacerse, toda vez que ninguna de ellas puede considerarse
de menor importancia,
al lado de las otras. Es esta la causa por la que se consideran sólo 17 parábolas, de entre las pronunciadas
por el Señor Jesucristo.
El estudio de las mismas se ha planteado desde la perspectiva de todos los anteriores manuales como elemento de
ayuda para enseñadores, profesores de Escuelas Dominicales, grupos de estudio bíblico, estudiosos
de la Escritura y, en general, para todo aquel que pueda interesarle una sencilla guía que le conduzca en
el estudio a interpretación de las parábolas del Señor, en unos tiempos en que las múltiples
ocupaciones que comprenden las jornadas cotidianas, impiden disponer de tiempo para esquematizar y resumir estas
enseñanzas.
Para la "interpretación" de las parábolas, se ha procurado tener en cuenta el contexto histórico
en que fueron pronunciadas y los destinatarios a quienes iban dirigidas, de modo que se haga honor a la intención
directa de Jesús cuando las dijo. Esto podrá chocar con interpretaciones tradicionales que habitualmente
se dan a las parábolas, y que tratan de "adapatarlas" a la iglesia, cuando muchas de ellas fueron dichas para Israel en relación
con el Reino. Pero si se ha procurado hacer una interpretación correcta de cada una, no es menos cierto
que debe hacerse una "aplicación" de las mismas para el momento presente y para la vida personal de cada creyente,
por cuya razón se da, al final de cada parábola, una "Aplicación Personal"
que indique pautas para ajustar la vida cristiana a las demandas
permanentes de Dios. Juntamente con esto, este manual contiene una serie de elementos de ayuda, tales como "Preguntas de Respaso" para
cada lección y una lista de "Bibliografía de
Consulta" para complementar y desarrollar los temas tratados
en el mismo.
Al usar este material para estudio bíblico en grupos, enseñanza sistemática en la iglesia, Escuelas Dominicales, etc. -que es uno de los propósitos para su confección- podrá ocurrir que algunas lecciones, aún con estar sintetizadas, son bastantes extensas, por lo que el enseñador no podrá abarcar en cada ocasión mas que ciertos aspectos de la misma para enfatizar lo que pudiera ser más necesario en cada momento, dejando luego a la diligencia del alumno, seguir estudiando en otro momento el resto de la lección. Todo estudiante, si este material se utiliza en un programa de eseñanza, deberá dedicar tiempo en su casa a la investigación personal y detallada del bosquejo de cada lección, a fin de llegar preparado a la clase, teniendo dispuestas las preguntas que le surjan para ser aclaradas por el profesor.
Si al finalizar este estudio, podemos conocer más de Jesús para vivir siguiendo sus pasos (1.P.2:21);
si somos capaces de descubir por la Palabra más de su gloria para caminar con los ojos puestos en Él
(He.12:2); si podemos decir -al final del estudio- como Pablo "Ya no vivo yo más vive Cristo en mí" (Gl.2:20), habrá sido cumplida la misión para la que fueron diseñadas
estas notas.
"Al que está sentado en el trono y al Cordero,
sean la alabanza, la honra, la gloria y el dominio por los siglos de los siglos. Amén.